🤔¿Quién puede contar con una pensión de gran invalidez?
La pensión de gran invalidez cuenta con distintas ventajas. En esta ocasión te mostramos cómo puedes sacarle el máximo partido.
La gran invalidez es el último grado de incapacidad permanente que se puede tener. Es decir, es una ayuda a la salud, destinada a ayudar a las personas que por un accidente o enfermedad no puedan trabajar. Te contamos todos los detalles en este artículo sobre la Gran Invalidez de Tus Ayudas.
Índice
La gran invalidez entra dentro de los diferentes grados de incapacidad permanente. Por orden de gravedad, los tipos de incapacidad permanente son los siguientes:
Esto significa que el grado de Gran invalidez es el más grave. Se otorga a las personas que, debido a haber tenido un accidente o enfermedad (tanto profesional como no profesional) no pueden realizar ningún tipo de trabajo y necesitan a una persona para subsistir y realizar las tareas del día a día. Entre estas tareas se encuentra el comer, desplazarse, vestirse, etc.
Los requisitos que hay que cumplir para poder recibir esta pensión son los siguientes:
Cada caso ha de ser evaluado individualmente, por lo que no podemos hacer generalizaciones sobre cuáles son las enfermedades que más comúnmente pueden promover una situación de gran invalidez.
Algunos de los casos en los que pudieran asignarnos una gran invalidez, corresponden a problemas como la ceguera, un cáncer muy avanzado, Alzheimer, esclerosis lateral amiotrófica (o ELA), amputaciones, etc.
Lo que tiene que ser justificable es que la enfermedad o sus secuelas no permitan al trabajador realizar ningún tipo de actividad laboral y que necesite el apoyo de otra persona.
Que te reconozcan la situación de gran invalidez conlleva una ayuda económica para que la persona que no puede trabajar, disponga de los ingresos necesarios para asegurar una vida digna.
Además de la pensión, la gran invalidez también conlleva ventajas sanitarias, el acceso a ciertas prestaciones en materia de salud, que cambian en cada caso concreto.
La Ley de Dependencia es una ayuda que se da a aquellas personas que necesitan el apoyo de una persona para poder realizar sus actividades del día a día.
Tanto el complemento de la Gran Invalidez como el importe que se recibe por la Ley de Dependencia tienen el mismo fin, por lo que no son complementarios. Esto significa que no podrás solicitar ambas ayudas al mismo tiempo.
Es común, que las personas que se encuentren en una situación de Gran invalidez tengan, al mismo tiempo, algún grado de discapacidad asignado, pero no tiene por qué ser así. Si consideras que puedes tener un grado de discapacidad determinado, será necesario que se analice tu caso particular para este fin.
La pensión por gran invalidez es el 100% de nuestra base reguladora, al igual que en la incapacidad permanente total. No obstante, también se reciben uno o más complementos (en función de las circunstancias de la invalidez) que te describimos a continuación:
En las pensiones, el importe máximo a recibir es de 2.707,49 euros al mes.
Como mínimo, el importe depende de las circunstancias del invalidado:
En caso de que consideres que tu incapacidad debería de ser del grado más alto, puedes solicitar una revisión de tu caso particular. Se trata de un procedimiento que puede hacerse online, a través de la Sede Electrónica de la Seguridad Social.
Si tras solicitar el cambio no te la conceden, puedes recurrir la decisión del INSS en este orden:
La solicitud de esta ayuda se realiza a través del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Si dispones de un Certificado digital podrás realizar la solicitud online, en caso de que no sea así tendrás que acudir físicamente a una de las direcciones provinciales del INSS pidiendo, con anterioridad, cita previa para que puedan atenderte.
La pensión de gran invalidez cuenta con distintas ventajas. En esta ocasión te mostramos cómo puedes sacarle el máximo partido.
Para poder contar con el certificado de gran invalidez es necesario pasar por un tribunal médico y contar con un diagnóstico. Después, una vez reconocido, descargarlo es tan sencillo como identificarse en la Seguridad Social a través de algunos de los métodos autorizados.
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